jueves, 20 de diciembre de 2012

Retazos ocultos...

Documento sin título

Verdad...

aquella voz en cada corazón;

cierra tus ojos,

y su silencio en la oscuridad,

entre el ruido absurdo

entre razones inecesarias

tendrá para tí

la palabra definitiva.

Amor...

es simplemente dar,

como lo más valioso

que puedes recibir;

como la plenitud más pura,

cuyo paso luminoso y sublime

siembra en cada alma

una semilla de dulce belleza...

Simplicidad...

tú que condensas lo profundo,

lo real, lo valioso;

aquello que está siempre allí

a la vista de tantos

que ciegos de apariencias

olvidaron tu existencia,

tu verdad...

Magia...

es aquello que hallas,

a cada instante

en cada latido,

compás de sueños puros

son el ahnelo,

navega la dulzura

cuya brújula no precisa norte

sólo un corazón sincero...

jueves, 13 de diciembre de 2012

Tintas de olvido...


Exiliado en el olvido
mi corazón aún late por tí,
atrapado en el silencio
sin que palabra alguna pueda ser pronunciada.
Necedad del alma que sostiene la amistad
sólo por no perderte aunque estes lejos de mí.

Sin tan sólo me lo pidieras
bastaría la dulce luz de tus ojos,
bastaría aquella sonrisa fresca
que hace de todo dolor o enfado
una necedad.

Sin tan sólo me lo pidieras
te abriría gozoso
las puertas de mi universo
aquel que desde un primer momento
siempre ha sido sólo tuyo.

Sólo tuya mi poesía,
aquella que no para nunca
de fluir de mis profundidades;
sólo tuyo mi anhelo absurdo
que pronto deviene en dolor.

Sabias las palabras
que de un soñador y tonto
corazón nacen;
sólo por intentar alcanzarte
aunque sea con semejante artilugio,
digno de aquel que no desea
tan siquiera rozar tu piel
sin antes haber ganado
regalo más grande que es tu corazón.

Mis deseos más profundos
quedan rezagados en estas tintas,
tintas del olvido y de sueños
vanos, sin respuesta
ni sentido.

Buscando una razón,
un pasar página en un libro
que tiene ineludiblemente
inscrito tu nombre;
buscando un cómo
sólo hallo un por qué.

Corazón solitario
que te ama irremediablemente,
a pesar del tiempo,
a pesar del silencio,
a pesar de tu "no";
sin otra razón que su amor mismo
sin otra que los bellos tesoros
que tu belleza sin querer
ha sembrado en mi memoria.

En el exilio del alma,
mi corazón aún te llama
aunque no quiera hacerlo;
pero según parece
es cierto que querer
no es lo mismo que amar...